*Diputados del PAN no pueden desconocer sentencia del TRIETAM
*Cabeza de Vaca enturbia la transición: Américo Villarreal
H. Matamoros, Tam. (5 de septiembre del 2022) Tamaulipas corre el grave riesgo de enfrentar una profunda crisis política, si no se resuelve en el corto plazo la disputa que mantienen las fracciones parlamentarias de Morena y del PAN por el control de la Diputación Permanente del Congreso del Estado, que ha provocado una parálisis legislativa, que nos deja una clara lección: Que hace falta que en el futuro inmediato emprender reformas claras y contundentes para que nunca más en la historia se repitan estos vergonzosos sucesos, estableciendo severas sanciones para quienes violen las nuevas normas jurídicas.
La grave crisis legislativa que actualmente está viviendo Tamaulipas se produjo el 30 de junio, al término del periodo ordinario de sesiones del Congreso del Estado, cuando por mandato constitucional debía elegirse a la Diputación Permanente, sin que fuera posible porque en dos votaciones hubo empates entre ambos bandos para elegir sus planillas.
Ante tales resultados, la mesa directiva del Congreso del Estado, bajo la presidencia de la diputada del PAN, Imelda San Miguel decretó un nuevo receso para volver a someter a votación la Diputación Permanente, lo que no fue aceptado por la fracción parlamentaria de Morena, que reclamó respetar el artículo 53 de la Ley de Organización del Congreso, que define que cuando no hay acuerdo en la elección de la diputación permanente se debe dejar la que estaba anteriormente.
La fracción parlamentaria del PAN, bajo el liderazgo de diputado Félix García Aguilar, no aceptaron, porque en la anterior Diputación Permanente la mayoría la tenía Morena, con dos diputados y el PAN con uno solamente.
El 30 de junio en la noche, los diputados de Morena decidieron abandonar el recinto legislativo, al no tener eco su propuesta en la bancada del PAN.
Ya sin la presencia de los legisladores de Morena, el PAN logró avalar la Diputación Permanente, la cual emprendió reformas en Leyes relacionadas con la Seguridad y las Comapas, las cuales fueron calificadas por los diputados morensitas como ilegales.
Ejerciendo sus derechos, como se recordará, la fracción parlamentaria de Morena impugnó las acciones hechas por los diputados del PAN, bajo el argumento de que se violaron sus derechos políticos, al dejar sin representación a dos de sus diputados.
El 29 de agosto pasado, el Tribunal Electoral de Tamaulipas le dio la razón a la impugnación que presentó la bancada de Morena, desconociendo la diputación permanente del PAN y ordenó acatar lo dispuesto en la Ley.
Los diputados locales del PAN pusieron oídos sordos a la sentencia del Tribunal Electoral de Tamaulipas, bajo el argumento que invadieron sus funciones y además porque impugnarían esa decisión.
Ante esa situación la fracción parlamentaria de Morena decidió instalar su propia Comisión Permanente.
Es por ese motivo que desde el 31 de agosto Tamaulipas tiene dos Diputaciones Permanentes, lo cual a todas luces es ilegal y anticonstitucional.
Por el bien de Tamaulipas y la buena gobernanza creemos que tanto la fracción parlamentaria del PAN en el Congreso del Estado y la de Morena, tienen que hacer a un lado sus radicalismos, porque reitero que a nada bueno puede conducir una crisis parlamentaria en el Estado, a unas semanas que comience el nuevo gobierno que encabezará el Dr. Américo Villarreal Anaya.
Las fracciones del PAN y de Morena tienen que encontrar una salida al conflicto sustentada en la Ley.
Si los diputados del PAN se extralimitaron en sus funciones y emprendieron acciones reñidas con la Ley, tienen que reconocerlo y aceptar el veredicto del Tribunal Electoral de Tamaulipas, dando posesión a la Diputación Permanente que había antes de que terminara el primer periodo ordinario de sesiones que termino el 30 de junio, aunque en ella no tengan mayoría.
La fracción parlamentaria del PAN en el Congreso en nada ayuda a una transición ordenada del Gobierno del Estado, que ya comenzó oficialmente el 1 de septiembre, en cumplimiento de la Ley.
La fracción parlamentaria del PAN tiene que hacer una reflexión sobre sus acciones, que no pueden estar reñidas con la Ley y tampoco pueden desconocer la autoridad que representa el Tribunal Electoral de Tamaulipas.
¿Dónde quedó el principio del PAN que siempre actúan dentro de lo que establece la Ley y también su reconocimiento a los veredictos de las autoridades electorales?
El PAN con sus actitudes en Tamaulipas en nada contribuye al fortalecimiento de la democracia, que dicen defender en Tamaulipas.
Reitero que es urgente que tanto en las fracciones del PAN y de Morena en el Congreso, recuperen la cordura y con oficio político poner fin a la grave crisis legislativa que está viviendo Tamaulipas.
Francisco Cabeza de Vaca enturbia la
Transición en Tamaulipas: Américo
En la edición del Proceso de esta semana, el gobernador electo, Américo Villarreal Anaya, lanza severas críticas al gobernador del Estado, Francisco García Cabeza de Vaca, a quien acusa de enturbiar la transición gubernamental.
Dice Américo Villarreal Anaya, que a menos de un mes de que asuma los destinos de Tamaulipas, está a ciegas, porque el gobierno del panista Francisco García Cabeza de Vaca, le cierra el acceso a la información “sobre las condiciones reales en las que se encuentra la entidad, al mismo tiempo que por la vía legislativa, evita la entrega recepción de áreas estratégicas como el manejo de los sistemas de agua potable y la seguridad”.
Afirma Américo Villarreal Anaya que en los últimos años ninguna sucesión en el país ha resultado tan turbia. Dice que en otras circunstancias buscaría un acuerdo e inclusive la conciliación, pero hoy a los gestos de aproximación no encuentran reciprocidad:
“Mi opinión en este momento y a lo mejor por lo que me ha tocado vivir, es que la posición (de Cabeza de Vaca) es enturbiar el proceso de entrega recepción, con la finalidad de no dejar ver claramente cuáles son las condiciones reales de lo que se está viviendo en la entidad”.
Y puso ejemplos:
La Diputación Permanente del Congreso Local, con mayoría cabecista y alianza con el PRI, modificó el 27 de junio, tres semanas después de las elecciones, diferentes estructuras institucionales sin seguir el procedimiento correspondiente. Así “de manera arbitraria y con la mayoría autoritaria se pasaron diversas áreas de seguridad a la Fiscalía General de Justicia de la entidad”.
Américo Villarreal sostiene en dicha entrevista de Proceso, que el objetivo es evitar que tenga acceso a la información sobre el estado de la seguridad y evitar el control que el gobernador en funciones tiene sobre el Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad; el Comando élite llamado Grupo de Operaciones Especiales; el Centro de Análisis, Estudios e Información de la Unidad de Inteligencia Financiera del Estado.
Dijo el Gobernador electo que con esa medida García Cabeza de Vaca, deja esas áreas estratégicas bajo el control del Fiscal de Seguridad Pública, Irving Barrios Mujica, un abogado identificado con el grupo político de Roberto Gil Zuarth, que está en el cargo desde 2016 y permanecerá ahí hasta el 2027.
Una medida similar intenta con los sistemas de aguas municipales, una importante fuente de ingresos. Una reforma en la materia, impuesta también por la diputación permanente, le quita al próximo Gobernador, la facultad para de remover directamente a los titulares de dichos sistemas, para hacerlo debe contar con la aprobación de una mayoría calificada en el Congreso Local.
Como puede observarse, son muy duros los cuestionamientos que el gobernador electo, Américo Villarreal Anaya, hace al gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, para enturbiar la entrega recepción del Gobierno del Estado.